Madrid,
21
Febrero
2019
|
14:01
Europe/Madrid

AVM CBRE 2.0: la inteligencia artificial al servicio del mercado inmobiliario

Resumen

CBRE, primera compañía a nivel internacional en consultoría y servicios inmobiliarios, presenta su nueva herramienta de valoraciones automatizadas, el AVM CBRE 2.0, una versión mejorada de su herramienta para valoraciones automatizadas que se beneficia de los avances más punteros en Inteligencia Artificial y Big Data.

en CBRE creemos en el uso de las últimas tecnologías para mejorar día a día el sector: las valoraciones automáticas, lejos de poner en peligro el sector de la valoración y tasación, suponen una oportunidad, ya que generan sinergias entre las distintas áreas inmobiliarias y permiten un mejor posicionamiento estratégico de nuestra compañía
José Antonio López Torralba, director técnico AVM & Valoraciones

Desarrollada por equipos propios de la consultora especializados en matemática, estadística e informática, es fruto de la fuerte apuesta de CBRE por el Big Data, la digitalización y las nuevas tecnologías al sector, incorporando las últimas técnicas aplicadas a la valoración inmobiliaria para permitir un servicio más completo, rápido y eficiente.

José Antonio López Torralba, director técnico AVM & Valoraciones regulares de CBRE destaca, “la inteligencia artificial basada en el Big Data está teniendo un enorme impacto en el ámbito de las valoraciones inmobiliarias, ya que el hecho de disponer de grandes bases de datos fiables y de sistemas informáticos capaces de tratar y extraer conclusiones de esa información es uno de los grandes retos a los que diariamente se enfrenta nuestro sector”.

De este modo, los modelos automatizados de valoración (AVM por sus siglas en inglés, Automated Valuation Model), incorporan importantes ventajas, como la alta fiabilidad de resultados y la agilidad de respuesta, ofreciendo valoraciones representativas en periodos muy cortos de tiempo. Así, es posible valorar grandes carteras de inmuebles y activos individuales con resultados altamente realistas.

Las limitaciones que encuentran están, fundamentalmente, en valoraciones de inmuebles singulares, o activos en mercados poco dinámicos o transparentes, ya que una de las claves principales de las AVM es contar con bases de datos amplias, completas y actualizadas. “Además, es imprescindible, en estos casos en particular, que la información que se ofrece sobre el activo sea completamente veraz para que los resultados sean correctos ya que, de lo contrario, la inteligencia artificial no podrá proveernos datos suficientemente fiables”, subraya López Torralba.

En este sentido, la consultora ha apostado por AVM CBRE 2.0 para reforzar la exactitud de los datos finales gracias a una serie de procesos de contraste de la información facilitada por el cliente, los cuales permiten llegar a resultados con una fiabilidad de entre el 90% y el 99% con tiempos de cálculo por inmueble en torno a 10 segundos. A estos se suma un conjunto de bases de datos cruzadas adecuadamente para obtener datos finales de la mayor calidad. Con este fin, se emplean tanto bases de datos públicas como privadas, así como otras de carácter interno de la compañía, concretamente las de Transacciones del Registro de la Propiedad, ofertas de portales inmobiliarios, tasaciones realizadas por CBRE y comparables enriquecidos utilizados en las tasaciones.

Estas dos funcionalidades se completan por un mecanismo de autoevaluación exclusivo de la compañía que, mediante procesos de similitudes físicas, espaciales y temporales entre los inmuebles valorados y los comparables utilizados, permite conocer la ratio de confianza que alcanza el resultado obtenido. Un dato que resulta determinante a la hora de tener en cuenta si la valoración es válida y fidedigna.

A día de hoy esta automatización de las valoraciones sólo se emplea para activos residenciales, aunque el objetivo es desarrollar un algoritmo con el que sea posible llegar a valorar todo tipo de inmuebles.